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Novak Djokovic se coronó ayer campeón del US Open al vencer a Rafael Nadal en la final del cuarto Grand Slam de la temporada, imponiéndose por 6-2, 6-4, 6-7 y 6-1. El serbio pasó a la historia tras ganarle al ex Nº 1 y consagrarse como el mejor tenista de la temporada, con 63 triunfos y sólo 2 derrotas.

El triunfo significó la primera victoria en Flushing Meadows del Nole, quien logró superar en 4 sets a un Rafa Nadal que luchó sin tregua pese a sus problemas físicos y acabó cediendo su trono en el torneo neoyorquino, que el año pasado lo había visto ganar precisamente frente a Djokovic.

Si bien el partido empezó bien para Nadal, ni el buen inicio del español ni el viento revoltoso que mareaba la bola lograron inmutar al serbio, quien se apuntó los 6 juegos siguientes y el primer parcial de la final.

Djokovic se adjudicó una gran temporada, en la cual ha vencido a Nadal en seis finales: cuatro torneos ATP World Tour Masters 1000, incluyendo los triunfos en Madrid, Roma, Wimbledon y el US Open. Ante esta situación, Rafa se propuso trabajar duro para desafiar nuevamente a su rival sin volver a sucumbir.

“Me gusta luchar. Quiero disfrutar estas batallas contra él. De seguro que seis derrotas seguidas son dolorosas. Pero voy a trabajar cada día hasta que eso cambie… Está haciendo todo muy bien mentalmente. Sólo hay que aceptarlo. Aceptar el desafío y trabajar”, afirmó el tenista español en la conferencia posterior al partido.